Así lo decidió el Gobierno para que la medida no impacte negativamente en las urnas. El aumento rondaría entre el 4 y 5 por ciento. Se suma a los aumentos en prepagas, teléfonos celulares, gas y luz.
El gobierno decidió postergar el aumento en los precios de los combustibles hasta después de las elecciones de octubre, buscando frenar la inflación y que no impacte negativamente en el resultado electoral del 22 de octubre.
El gobierno tiene un acuerdo firmado con las compañías petroleras que lo obliga a actualizar el precio de los combustibles cada tres meses de acuerdo a la evolución del dólar y los precios internacionales del barril de petroleo.
La decisión fue tomada, según fuentes gubernamentales, luego de que se avanzara en un acuerdo con las empresas para postergar el aumento de los precios en el último trimestre del año, que a partir del 2018 quedarán liberados.El gobierno buscará graduar la aplicación de los aumentos de los combustibles, junto con lo de luz y gas previsto para el último trimestre, para no comprometer las metas de inflación del Banco Central.
Las petroleras pretenden accederían a aplicar un nuevo aumento en los combustibles que rondaría el el 4 o 5 por ciento a partir de noviembre, lo que sería el cuarto del año.
En el 2016 los combustibles aumentaron un 31%, por debajo de la inflación, mientras que en lo que va de este año, la nafta subió aproximadamente un 16% y el gasoil un poco menos se ubica por encima de la inflación.
No obstante las petroleras quieren que en noviembre se discuta una actualización superior, para compensar el atraso que los precios tuvieron en el año anterior cuando la inflación rondó el 20%.
La Federación de Entidades de Combustibles (FEC) reclamó que tras las elecciones «se sienten el Gobierno y las petroleras para ponerse de acuerdo y no incrementar los precios al surtidor hasta el año que viene».
En un comunicado, la entidad fundamentó su pedido en que «el impacto de la inflación es el mismo para todos los ciudadanos sin importar el voto que pongan en la urna».
La declaración de la FEC agregó que «si vuelven a aumentar los combustibles, las ventas que en estos meses se han recuperado volverán a caer afectando la rentabilidad de las estaciones de servicio independientes». NA.