La tradicional celebración de la comunidad judía se llevó a cabo en el ámbito de la céntrica plaza Mitre, con el encendido comunitario al bajar el sol del candelabro gigante que da inicio a una festividad de ocho días de duración.
En el marco de una nueva celebración de la “Fiesta de las Luces” en San Fernando, el Rabino de la Comunidad San Fernando-Tigre, Moshé Aburdarham, detalló: “Hace unos años, empezamos en la calle Constitución 1470, con un nuevo rumbo que no se venía viendo, que es expandir el judaísmo. Y dentro de esta expansión, empezamos a tener cada año la fiesta de Janucá o de las luminarias que es tan importante, porque es la única que se nos permite luminarias afuera. La gente viene de todas las comunidades y participa. Es un evento que creo aparte de agradecer al Municipio que nos aporta, que estamos dando mucha fuerza al lugar en si con esta festividad, que nos da una capacidad muy particular de estar asociados a la alegría, lo que es el milagro, el agradecimiento”.
“Hubo de todo en esta fiesta: encendido, bailes, palabras alusivas a la festividad, videos, juegos. Todo esto nos transmite, nos lleva de alguna forma a compartir; por eso les deseo felices fiestas a toda la comunidad en general de todo San Fernando, agradeciendo el apoyo, estar siempre con nosotros y que nos podamos reunir en momentos de alegría como este, y que cada día tengamos más gente, más participación y que esto ayude a iluminar a todo San Fernando, a la Argentina y al mundo entero”, concluyó el Rabino.
Y su hijo Jacob, también rabino, agregó: “Tenemos el gusto de estar aquí en este hermoso encuentro en esta plaza, el acto de Janucá en el que iluminamos la plaza Mitre y el alma de todos los aquí presentes. Cada uno tiene una luz propia, que hay veces que tiene que revelar. Al hacerlo, ayuda a que haya una luz mucho más potente para iluminar el mundo entero. Esto se puede ver más, no sólo en la rama religiosa judía, porque cada uno es una luz propia. Muchas de las festividades judías son un potencial para que en el año lo podamos desarrollar. En este caso es la luz, que podemos también revelar, encontrar, buscar en cualquier día del año”.
“Hoy festejamos un hecho de hace más de 2.000 años, una victoria de pocos frente a muchos, de impuros frente a puros, donde se encontró una pequeña vasija de aceite que ardió durante 8 noches, por lo que el 25 de Kislev de cada año, encendemos la primera vela de Janucá al bajar el sol, sumando una luz por día hasta tener 8, porque la meta es agregar luz y aproximar la llegada del Mashía, con el que veremos la luz en todo su potencial, su luz divina revelada en la Tierra”, concluyó.
En cuanto a los vecinos que concurrieron, Daniel Zimmerman, presidente de la Comunidad Israelita de San Fernando, destacó: “Es un honor para mí estar en esta festividad y encender luz para la humanidad, y que todos los pueblos, religiones y culturas vivan en paz, se aprecien y se den un lugar para poder coexistir en esta ciudad tan hermosa y pujante, con una buena calidad de vida para todos. Tiene luminarias en todas las calles hasta donde termina el Municipio, y se puede disfrutar de sus espacios públicos de calidad donde sea. San Fernando se renovó completamente”.
“El Municipio siempre nos acompaña en todas las actividades que realizamos en nuestra sede de Constitución 1470. Y ante nuestro interés de querer celebrar Janucá en esta plaza, pusieron todo a nuestra disposición. Estamos muy agradecidos”, finalizó Zimmerman.