Tras lo sucedido, el titular de la agencia de prevención de violencia decidió que el «Cervecero» juegue su próximo partido con solo presencia de socios.
La Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) de la provincia de Buenos Aires resolvió hoy que solamente los socios de Quilmes puedan asistir al próximo partido cuando el equipo juegue como local, tras los incidentes que sus hinchas protagonizaron durante el encuentro contra Boca en Mendoza.
De esta manera, la Aprevide aplicó un castigo, aunque moderado, al club del sur del Gran Buenos Aires con motivo de los disturbios ocasionados por simpatizantes del conjunto «cervecero» en el estadio Malvinas Argentinas de la capital mendocina en la noche del miércoles frente a Boca, por los cuartos de final de la Copa Argentina y con triunfo «xeneize» por 3-2.
El encuentro en Mendoza se vio empañado por los incidentes que protagonizaron los hinchas del equipo bonaerense cuando se enfrentaron con efectivos de la guardia de infantería y la Aprevide tomó cartas en el asunto.
Transcurría casi media hora de juego del complemento cuando los simpatizantes de Quilmes invadieron una platea de Boca en el estadio mendocino y se enfrentaron con la Policía, después de la intervención de los efectivos para frenar los desmanes.
Desde un sector ocupado por la parcialidad de Quilmes, club que milita en la Primera Nacional, comenzaron a arrojar proyectiles hacia la tribuna del rival hasta que pasaron los vallados e ingresaron en la platea.
En ese momento llegaron los uniformados que obligaron a los hinchas quilmeños a retroceder, mientras los bomberos intentaron calmar la situación arrojando agua a la hinchada del club del sur del Conurbano bonaerense.
La acción de los bomberos llevó a los jugadores de Quilmes, encabezados por el experimentado delantero Mariano Pavone, a increparlos, al tiempo que el jefe de seguridad del club resultó herido al ser impactado por un proyectil en la cabeza, lo que le produjo un corte por el que tuvo que ser atendido por los médicos.
«Es triste, lamentablemente es una tristeza. Venimos a un espectáculo deportivo y tenemos que vivir esto. Creíamos que se podía volver a jugar con las dos hinchadas y ahora vemos este episodio», declaró el árbitro Ariel Penel.
Ante este hecho de violencia, el titular de la Aprevide, Eduardo Aparicio, resolvió que el próximo partido que Quilmes juegue en el Estadio Centenario sea solo con presencia de socios: frente a Deportivo Maipú de Mendoza, por la trigésimo séptima y última fecha del campeonato de segunda división.
Al mismo tiempo, Aparicio afirmó que mantuvo una comunicación con el presidente de la institución de zona sur, Mateo Magdán, que se mostró preocupado ante el trato que recibieron los hinchas «cerveceros» en Mendoza.
Según el dirigente, los encargados de la seguridad retuvieron a los fanáticos en las afueras del estadio durante siete horas y los dejaron ingresar con el encuentro ya comenzado.
Por otro lado, el titular de la Aprevide contó que ya está tomando cartas en el asunto para intentar identificar a los culpables de los incidentes: «Ya me comuniqué con las autoridades de seguridad de la provincia de Mendoza para que nos pasen todas las imágenes. Vamos a ir a fondo con los violentos que sembraron el caos anoche. Les caerá todo el peso de la ley», enfatizó Aparicio.