«Los que gobernamos en la Argentina creemos en la producción, en el desarrollo y en la distribución equitativa del empleo», reafirmó el Presidente al encabezar el acto de lanzamiento de los programas nacionales de Desarrollo de Proveedores (Prodepro) y de Desarrollo de Parques Industriales.
El presidente Alberto Fernández recordó este jueves que entre 2003 y 2015 «el salario real creció 19 puntos», afirmó que entre «el 2015 y 2019 cayó 20 puntos» y aseguró que ahora el desafío es que «la inflación no se coma los aumentos» para conseguir una mejor distribución del ingreso.
«Todo lo que se logró en 12 años se perdió en 4. Nosotros llevamos recuperados 4 puntos de los muchos que tenemos que recuperar», expresó el jefe de Estado al encabezar en Las Parejas, Santa Fe, el acto de lanzamiento de los programas nacionales de Desarrollo de Proveedores (Prodepro) y de Desarrollo de Parques Industriales.
En esa línea, sostuvo que «estamos produciendo mucho más, se está generando mucho empleo, pero no estamos logrando distribuir» y advirtió que «hay que corregir los salarios y que la inflación no se coma los aumentos».
Desde una fábrica de maquinaria agrícola, el Jefe de Estado realizó un discurso en el que recordó la histórica marcha realizada en 1982 por la Confederación General del Trabajo (CGT) contra las políticas económicas de la última dictadura cívico-militar y el correlato del «capitalismo especulador y financiero» de aquella etapa durante el Gobierno de Mauricio Macri.
«Quienes convocaban a salir a las calles decían lo que pasaba en la Argentina, cómo la apertura indiscriminada de importaciones había terminado con la industria nacional, había generado el desempleo y postergado el desarrollo de la sociedad y como se había desindustrializado el país. Uno tenía la sensación de que estaba hablando de lo que pasó hace muy poquito, de lo que pasó entre 2015 y 2019», señaló.
«Cuando me encuentro con industriales, me cuentan lo que era el supuesto Ministerio de la Producción (macrista), donde les recomendaba dejar de producir acá, mandar a producir a China y etiquetar en Buenos Aires», señaló y afirmó que «los industriales siguieron aguantando sabiendo que iba a cambiar y cambió».
En ese contexto, sostuvo: «Los que gobernamos en la Argentina creemos en la producción, en el desarrollo y en la distribución equitativa del empleo», para luego reiterar que hay que «recuperar el salario de la gente».
«El capitalismo, del que no reniego, tiene un actor central que es el consumidor«, apuntó el Presidente y señaló que «sin el consumidor, se muere, se pega un tiro en el pie».
Fernández se refirió con especial atención al alza de los precios y, aunque figuradamente afirmó que «las balas» de la guerra europea «golpean» a la economía del país, reconoció que esa situación no es la causa de la inflación.
Fue allí donde señaló el «momento único'» y estimó que «no es posible que esa excepcionalidad la paguen todos y no el que está ganando».