En medio del debate por las armas no letales y tras el crimen de la policía en Retiro, el ministro de Seguridad indicó que serán portadas por grupos de élite.
El ministro de Seguridad Aníbal Fernández confirmó la autorización del ingreso de pistolas eléctricas Taser para la Policía Federal y aseguró que la fuerza porteña podrá usarlas, en plena discusión por el uso de armas no letales luego del asesinato a tiros de la policía Maribel Salazar en Retiro.
El titular de la cartera de Seguridad explicó que el proceso de adquisición de pistolas Taser empezó en octubre del año pasado, pero que todavía no las tienen porque la operación está en desarrollo, y que cuando las posean “los grupos de élite empezarán el entrenamiento”. El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, ratificó que compraron 100 pistolas con descargas eléctricas.
El ministro de Seguridad explicó que la policía de la Ciudad también podrá usarlas, en referencia al reclamo del gobierno porteño para que Nación los autorice a emplear unas 60 pistolas Taser compradas años atrás: “Seguramente sí”, dijo al respecto el funcionario, en declaraciones a Radio 10.
El Gobierno compró 100 pistolas Taser sin licitación, en pleno debate tras el asesinato de una policía
La división contrataciones de la Policía Federal compró 100 pistolas Taser en forma directa a cambio de unos U$S170 mil, poco más de $32 millones al tipo de cambio comprador del Banco Nación, en pleno debate por el uso de estas armas no letales tras el crimen de Salazar.
Se trata de 100 pistolas Taser modelo T7, que llegarán al país con accesorios, cartuchería y licencias. Se trata de una “contratación directa por adjudicación simple por exclusividad”. La empresa que proveerá las pistolas es AXON Enterprise Inc, a la que se le pagarán U$S 169.990.
El proceso de compra de las pistolas Taser empezó el 31 de octubre y la adjudicación se produjo en los últimos días de diciembre de 2022. Finalmente la orden de compra llegó en febrero de este año. La compra se autorizó el 15 de este mes, tan solo un día después del asesinato de Zalazar, que recibió dos disparos cuando quiso intervenir en una discusión entre un pasajero y un trabajador del subte. El asesino le quitó su arma reglamentaria, le disparó y la mató.
