El local se impuso por 2 a 1 en la Bombonera, aunque pudo ampliar la diferencia, y mostro, con algunos jóvenes, un buen funcionamiento.
Una formación alternativa de Boca empezó con buen pie su participación en la Liga Profesional de fútbol, al derrotar claramente a Arsenal por 2 a 1, en un encuentro válido por la primera fecha, disputado anoche en el estadio la Bombonera.
El defensor Agustín Sández puso en ventaja a Boca, a los 14 minutos del primer tiempo, luego aumentó el colombiano Sebastián Villa, a los 16, y descontó para el equipo visitante Mauro Pittón, sobre los 28 de la parte inicial.
El resultado fue demasiado ajustado, ya que Boca tuvo muchas posibilidades para ganar por un margen más amplio, pero falló en la definición y además se encontró con una gran actuación de Alejandro Medina, el arquero rival, especialmente en el segundo período.
El entrenador de Boca, Sebastián Battaglia, decidió iniciar la rotación ante la seguidilla de encuentros que debe afrontar su equipo: El torneo local, los octavos de la Copa Libertadores. En principio, el próximo miércoles se enfrentará a a Ferro, por la Copa Argentina, en La Rioja.
Cuando apenas se jugaba el cuarto incial Boca ya estaba 2 a 0, gracias a un cabezazo de Sández y también a una gran definición de Villa dentro del área, lo que presagiaba un trámite de fácil resolución, pero no fue tan así.
De hecho, luego de haber logrado esa venta Boca bajó la intensidad y permitió una tibia reacción de Arsenal, que prácticamente no había pisado el área local hasta que en su primera llegada -casi sobre la media hora de juego- Pittón aprovechó una gran asistencia de Colman y solo frente a García marcó el descuento.
Ese gol le puso algo de suspenso al resultado, ya que Lomónaco estuvo cerca del empate, pero García desvió al córner, aunque después Boca volvía a preocupar a Arsenal con la movilidad de Zeballos y de Villa por los costados.
De hecho, un remate del colombiano desde la puerta del área tenía destino de gol, pero el arquero Alejandro Medina salvó su valla sobre el final del primer tiempo.
Después, en la segunda parte todo fue de Boca, que presionó y trató de aumentar pero no pudo, más allá de haber tenido seis situaciones claras para definir el partido mucho antes de que llegara el final.
Un cabezazo de Vázquez, que se fue cerca, un zurdazo bajo de Villa, un remate de afuera de Molinas, otra aparición de Zeballos, una del recién ingresado Orsini, así desperdiciaba Boca sus posibilidades una y otra vez.
Y ya en tiempo de descuento casi lo lamenta, pero se salvó porque Brochero -de frente al arco- remató débil y le permitió a Figal rechazar un balón que tenía destino de gol.
Con esa fortuna de su lado, Boca se llevó una victoria merecida, aunque no debió sufrir para doblegar a un oponente muy limitado, pero empezar con una victoria siempre sirve para retemplar el ánimo.