La vicepresidenta, Cristina Kirchner, hizo este martes un vehemente descargo de una hora y media por la Causa Vialidad, luego de que la fiscalía pidiera 12 años de cárcel en su contra.
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner dio hoy un discurso a modo de “derecho a la defensa” luego de que el fiscal Diego Luciani pidiera doce años de prisión en su contra en el marco de la Causa Vialidad.
“No les importa nada, van por todo, pero no por mí. Se los dije una vez antes de irme como Presidenta: no vienen por mí, vienen por ustedes, por los salarios, los derechos de los trabajadores, de los jubilados, del endeudamiento. Vienen y vinieron por eso, y por eso hoy todavía estamos pagando esas consecuencias”, sostuvo.
La Vicepresidenta sostuvo hoy que el juicio de Vialidad «no es un juicio a Cristina Kirchner» sino que es «un juicio al peronismo, a los gobiernos nacionales y populares, a los que peleamos por el salario, las jubilaciones la obra pública».
«Me preocupa mucho la situación de millones de argentinos. Esto tiene que ver con todo. Necesitan dirigentes disciplinarios y funcionarios que hagan lo que el poder real quiere», dijo Cristina Kirchner.
En su mensaje, la Vicepresidenta ejerció su «derecho a la defensa» ante las acusaciones y nuevas pruebas incorporadas por la fiscalía en el último tramo del debate oral por el presunto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz, en el marco de la exposición de sus alegatos, luego de la cual el tribunal se negó a concederle la posibilidad de ampliar su declaración indagatoria.
Cristina Kirchner aseguró hoy que «nada de lo que dijeron los fiscales fue probado», sino que «fue un guión bastante malo y falso» y cuestionó a los funcionarios judiciales Diego Luciani y Sergio Mola por no investigar las comunicaciones telefónicas del exsecretario de Obras Públicas, José López, y el empresario Nicolás Caputo, amigo del expresidente Mauricio Macri, las que «serían un escándalo monumental según sus criterios, pero sorpresivamente no les llamó la atención».
La exmandataria mostró comunicaciones entre Caputo y López, que demuestran la «familiaridad» que había entre ambos y aseguró: «Nada de lo que dijeron los fiscales fue probado. El juicio empieza con la ficción que relataron, durante cinco días los fiscales. No eran acusaciones, eran un guión y bastante malo por cierto».
«No solamente no fue probado, sino que se comprobó que era exactamente al revés de lo que decían. Lo pudimos ver a través de los testimonios de más de 100 testigos citados por el Ministerio Público Fiscal», aseguró.
En la causa Vialidad, al concluir la etapa de alegatos, el fiscal federal Diego Luciani pidió ayer que se condene 12 años de prisión e inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos a la vicepresidenta en la causa por supuesto direccionamiento de la obra pública vial en Santa Cruz, que tiene a otros imputados.
Después del alegato de Luciani, el Tribunal Oral Federal (TOF) N° 2, integrado por Rodrigo Giménez Uriburu, Andrés Basso y Jorge Gorini, rechazó el pedido presentado temprano por la Vicepresidenta para ampliar hoy su declaración indagatoria.
Por eso, con un video en vivo, Cristina Kirchner realizó una ampliación de su declaración sobre los proyectos de vialidad que comenzó con la muestra de varias notas periodísticas, remarcó que «en 2011 el juez (Julián) Ercolini se declaró incompetente y luego con el cambio de Gobierno cambió», e insistió: «La sentencia ya está escrita».
Y agregó: «Me quedé corta cuando dije que la sentencia ya está escrita porque cuando llegamos al Gobierno nos enteramos lo que hicieron desde la mesa judicial en el anterior gobierno y el sistema de espionaje que montaron desde la AFI (Agencia Federal de Inteligencia) y la Gestapo para los dirigentes sindicales en La Plata».
En otro pasaje de su discurso, la Vicepresidenta se preguntó: «¿No le llamó la atención la familiaridad de López con Caputo? Con la frecuencia y la cotidianidad que tenían entre ellos me llama la atención que al fiscal (Diego) Luciani y (Santiago) Mola no le llame la atención esto. Notable».
Y continuó: «No lo habrá investigado. No lo habrá llamado porque comparte vestuario cuando va a jugar al fútbol en la quinta los Abrojos», propiedad de Macri en el partido de Malvinas Argentinas.
Cristina Kirchner además aseveró que «se va a demostrar que además de mentirosos, los fiscales no trabajaron. No leyeron las pruebas que consta de 9 mil fojas».
Al conocerse el alegato de la fiscalía y la decisión del tribunal de no permitir el pedido de la vicepresidenta, mientras Cristina Kirchner anunciaba que hablaría hoy, los militantes comenzaron a llegar a su casa del barrio porteño de Recoleta, donde realizaron una multitudinaria vigilia que se extendió hasta que salió de su vivienda rumbo al Senado, donde también fue recibida por sus seguidores.
Asimismo, la expresidenta sumó el apoyo del jefe de Estado, Alberto Fernández; todo el gabinete nacional; los gobernadores peronistas; la CGT y la CTA; los movimientos sociales; y además se expresaron varios dirigentes políticos internacionales, entre ellos, ‘Lula’ Da Silva y Dilma Rousseff, quienes recordaron los casos de lawfare que sufrieron en Brasil.
El pedido de Luciani ante el Tribunal Oral Federal 2 fue fundamentado en que Cristina Kirchner fue la «jefa de una asociación ilícita», a la que se acusa además de haber cometido el delito de administración fraudulenta contra el erario.
La exposición final del fiscal, en el alegato en el que intervino también su colega Sergio Mola, incluyó exhortaciones a los miembros del TOF 2 a dictar una sentencia «ejemplar» para que se convierta en «el primer paso para restaurar la confianza de la sociedad en las instituciones».
En el plano judicial, el Tribunal Oral Federal (TOF) N° 2, decidió ayer pasar a un cuarto intermedio hasta el lunes 5 de septiembre.