Un estudio realizado por tres universidades públicas dejó al descubierto índices de inseguridad alimentaria, laboral y social en la población bonaerense que marca un triste panorama de cara al futuro.
El deterioro del panorama social continúa en deterioro, según un reciente estudio realizado por la Unviersidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo, la Universidad Nacional Arturo Jauretche y la Universidad Nacional de Hurlingham.
El trabajo se realizó en base a una investigación de opinión pública a partir de 2400 entrevistas telefónicas a teléfonos fijos, muestra que se tomó entre el 11 y el 14 de julio de este año.
Así, aseguran que más de la mitad de los hogares del segundo cordón del conurbano (el 52%) han disminuido la porción de comida por problemas de ingresos, consecuencia de la inestabilidad económica del último año, a la vez que no observaron aquí signos de recuperación en relación a abril de 2017.
En tanto, agregan que la crisis laboral genera un aumento en el miedo a perder el trabajo en el corto plazo. Luego de la leve caída de abril de 2017, en julio se produjo un incremento en esta inseguridad (43%). En el segundo cordón del Conurbano este temor afecta casi a la mitad de los entrevistados (49%).
Asimismo, apuntan que la inseguridad laboral se ve reforzada por la pérdida de puestos de trabajo dentro del núcleo cercano. De esta forma, el 39% de los entrevistados ha tenido una experiencia reciente en ese sentido. En el segundo cordón es el 44%; en CABA, 29%.
El total de personas que afirman además que su salario no les alcanza para cubrir sus necesidades básicas aumentó un 30% entre diciembre de 2016 y julio de 2017. Esta situación afecta actualmente a seis de cada diez personas entrevistadas en el AMBA (58%), mientras que menos del 10% de los entrevistados afirma que sus ingresos les permite ahorrar.
