El ex presidente Mauricio Macri presentó este jueves su libro «Primer Tiempo» en lo que fue su primer acto público tras dejar el poder en 2019 luego de ver naufragar sus sueños reeleccionistas en medio de la profunda crisis económica, financiera y social a la que llevaron las políticas que desplegó a lo largo de la gestión.
En ese marco dio la respuesta a uno de los grandes debates internos que atravesaron los primeros años de su gobierno: gradualismo o shock. Y esta vez el ex Presidente no dudó y aseguró que en un eventual nuevo gobierno de Juntos por el Cambio no habrá lugar para el gradualismo.
«Mario Vargas Llosa es coherente, me preguntó lo mismo en 2019. Definirnos como gradualistas fue una forma elegante de disfrazar la enorme debilidad política que teníamos. Fuimos minoría en ambas cámaras durante 4 años y no nos tocó la versión más amigable del peronismo. Cuando uno mira lo que hicimos podemos decir que ambos pueden tener razón. Hicimos muchas reformas por las que el kirchnerismo nos dijo que éramos neoliberales inescrupulosos y faltaron otras reformas que hicieron que desde la ortodoxia nos dijeran que todo era insuficiente», aseguró Macri.
Y completó: «Lo bueno es que el 2023 no va a tener nada que ver con el 2015, la crisis no va a ser asintomática porque este Gobierno con las medidas que está tomando va a llevar que Juntos por el Cambio vuelva al poder con una enseñanza adquirida y con esa comprensión de la dimensión real de la crisis vamos a poder hacer un paquete global de reformas porque vamos a contar con el apoyo para eso».
El ex mandatario hizo alusión además al debate interno que divide al macrismo y aseguró que para volver a ser gobierno «necesitamos de las palomas, los halcones, los gorriones, los picaflores y hasta las gallinas».
Macri contó que el libro nació a partir de las notas y grabaciones que fue haciendo a lo largo de los cuatro años de gobierno donde expresó preocupaciones, conflictos, pensamientos y después «de un año de silencio y reflexión sobre lo que hicimos, lo que no hicimos, lo que pudimos y lo que no pudimos».
Desplegó además un discurso muy similar al que sostenía en la campaña que lo llevó a la Casa Rosada como si de aquel tiempo a este ni hubiese formado un gobierno. «Este es momento de focalizarnos en defender la democracia, la República, las libertades y busco reivindicar esos dos pilares que son por los que hoy estamos acá: para ayudar a que la gente viva mejor y para transformar la realidad».
«El populismo crece a medida que avanza la resignación, nosotros somos el antídoto a eso. El kirchnerismo es la expresión final del populismo, estoy convencido de que la Argentina va a entrar en un período de 20 años de crecimiento racional», señaló.
Y advirtió a sus votantes, en obvia alusión a las elecciones legislativas de octubre próximo, que «el segundo tiempo ya comenzó en este 2021».