El candidato presidencial del Frente Todos obtuvo una ventaja de más de 15 puntos porcentuales sobre Macri. En Provincia Kicillof amplió la diferencia a 18 puntos.
Ni el más pesimista de los sondeos de intención de voto encargados por el gobierno de Mauricio Macri anticipó semejante debacle. En la Casa Rosada sabían que el escenario se presentaba fuertemente polarizado pero confiaban en que la ventaja que todas las encuestas otorgaban al binomio Alberto Fernández – Cristina Kirchner se limitaba a un puñado de puntos.
Lo cierto es que tras el papelón por la demora en la difusión de los datos oficiales, la Dirección Nacional Electoral informó que con el 88,17% de las mesas escrutadas el Frente Todos obtuvo el 47,34% de los votos frente al 32,25% de la fórmula integrada por Mauricio Macri – Miguel Ángel Pichetto. Más de 15 puntos de diferencia y guarismos que, de repetirse el 27 de octubre próximo, garantizarían un triunfo en primera vuelta de Fernández.
Muy lejos, con apenas el 8,35% de los votos quedó la fórmula integrada por Roberto Lavagna y Juan Manuel Urtubey. Tan relegado quedó Consenso Federal que no llegó siquiera a erigirse en una tercera vía con proyección de futuro y muy probablemente pase a la historia sin pena ni gloria.
El escenario político ultrapolarizado quedó en evidencia en las urnas. Los dos candidatos más votados concentraron por sí solos el 80% de los votos y se espera que de cara a octubre los dos sumen más voluntades a medida que los votantes de otras fuerzas busquen un «voto útil» hacia alguna de esas dos fuerzas.
El precandidato a gobernador bonaerense del Frente de Todos (FdT), Axel Kicillof, obtuvo el 49,34% de los votos contra el 32,56% que alcanzó la oficialista María Eugenia Vidal, escrutados casi el 98,57% de las mesas de electores de la provincia de Buenos Aires. Durante la mañana del lunes habló con la prensa en la puerta de su casa y pidió responsabilidad al gobierno.
Kicillof aseguró que si bien falta tiempo para las elecciones de octubre, este domingo se mostró que «la mayoría de provincia y el país quiere algo distinto, un gobierno que cambie las prioridades».
«Esperamos que el Gobierno sea responsable y lleve tranquilidad a la población», destacó el ex ministro de economía y remarcó que él sólo es un candidato. «Nosotros nos presentamos ante la sociedad, no ante los mercados», destacó.