Lo dijo Horacio Marín en un evento ante empresarios este martes. Se espera que el resto de las petroleras sigan el mismo camino la semana que viene.
El presidente de YPF, Horacio Marín, dijo que la petrolera estatal analiza la posibilidad de bajar los precios de venta al público de todos los combustibles por la caída del precio internacional del petróleo Brent, que es el valor de referencia en la Argentina. La medida que evalúa la empresa se aplicaría a partir de octubre.
“Lo estamos analizando para el fin de semana o el lunes próximo. Estamos viendo el barril, que está volátil. Ayer estaba en US$73 o US$74, pero en algún momento estuvo en US$72. Esto para mí es un cambio de paradigma importante y lo tenemos que hacer en la Argentina. Para ser un país normal, cuando aumento el petróleo tenemos que aumentarlo, y cuando baja, tenemos que bajar el precio de los combustibles”, afirmó el directivo.
Durante el Foro de Energía organizado por la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en la Argentina (Amcham), el ejecutivo explicó que la decisión depende de cómo sigan los valores internacionales del petróleo y de que el Gobierno postergue el incremento en el impuesto a los combustibles líquidos (ICL).
Según explicaron fuentes del sector, los precios de YPF podrían bajar cerca de un 3% promedio. Si bien la petrolera de bandera sería la que dará el primer paso, se espera que el resto de las empresas (Axion, Shell -Raízen- y Puma, entre otras), sigan el mismo camino la semana que viene.
La nafta súper de YPF en la Ciudad de Buenos Aires cuesta $1059 desde el primero de septiembre y la premium $1309 por litro. El gasoil super vale $1084, mientras que el diesel premium llega a $1334 por litro.
En el caso de la nafta súper, se observa un aumento acumulado de 240% desde noviembre del año pasado, del 91% desde diciembre y del 51% en lo que va del año.
En ese proceso jugaron tres factores: el traslado de la devaluación, la liberalización inicial de los precios para acercarse a los internacionales y la recomposición parcial del atraso que acumuló el ICL durante los últimos años.