Es el monto que precisó un hogar de dos adultos y dos niños. En cambio, para una sola persona esa cifra fue de $18.769.
Una familia tipo, compuesta de dos adultos y dos niños, necesitó $57.997,48 en febrero para no ser considerada pobre. Así se desprende del último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) sobre la Canasta Básica Total y la Canasta Básica Alimentaria, que definen las líneas de pobreza e indigencia respectivamente.
La Canasta Básica Total (CBT) aumentó un 2,7% en febrero con respecto al mes anterior, por debajo de la inflación, que fue del 3,6%. En el caso de la Alimentaria (CBA), la variación siguió el mismo nivel del aumento generalizado de precios; es decir, subió un 3,6%.
La variación interanual entre febrero de 2021 e igual mes de 2020 fue de 42,2% para la CBT y de 46,4% para la CBA, respectivamente. En ambos casos, por encima del dato de inflación general, que acumuló 40,7% en el mismo período.
El mismo hogar de cuatro personas tuvo que ganar al menos $24.575 para no ser considerado indigente. Para una sola persona, ese límite fue de $7.953. La CBA considera solamente alimentos y se calcula tomando en cuenta los “requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos” imprescindibles para que un varón adulto, entre 30 y 60 años cubra sus necesidades durante un mes, explica el informe del Indec. En el caso de la CBT, se amplía más allá de los alimentos y considera los bienes y servicios no alimentarios.
El precio de los alimentos preocupa al Gobierno ya que afecta especialmente a los sectores más vulnerables de la población, que destinan una mayor parte de su ingreso a esos productos. En los primeros dos meses del año subieron por encima de la inflación: un 4,8% en enero y un 3,8% en febrero, por encima del 4% y del 3,6% del nivel general, respectivamente.