Al exponer en el Consejo de las Américas, el ministro destacó la merma de 0,3% respecto al primer trimestre del año, y aseguró que hay «niveles de consumo en algunas regiones del país y de producción y aumento de capacidad instalada que llegan a niveles que hace dos años, en medio de la pandemia, no imaginábamos».
El ministro de Economía, Sergio Massa, aseguró este jueves que «sin estabilidad macroecómica no hay paz social pero sin paz social no hay estabilidad macroeconómica» y agregó que «las tensiones se ven reflejadas en las decisiones que debe tomar el Estado y los privados a la hora de invertir».
Así lo expresó al disertar en el cierre del encuentro del Consejo de las Américas que se desarrolla en Buenos Aires, donde consideró que la estabilidad macroeconómica «es un trabajo conjunto entre el Estado, los gobernantes, pero también con los actores económicos y sociales de la Argentina».
En este contexto, sostuvo que «las tensiones (sociales) se ven reflejadas en las decisiones que debe tomar el Estado y los privados a la hora de invertir».
En su alocución, Massa destacó los niveles de consumo y producción del país, y adelantó que el índice de desempleo bajó a 6,7%, al tiempo que remarcó el objetivo de lograr el orden fiscal y sostener el superávit comercial en lo que resta del año.
«En las próximas horas se conocerá una baja del desempleo al 6,7%, en línea con los números en distintas regiones y provincias, que muestran un crecimiento del 5% con números inesperados en materia de empleo formal», remarcó Massa.
Asimismo, resaltó que hay «niveles de consumo en algunas regiones del país y de producción, y aumento de capacidad instalada que llegan a niveles que hace dos años, en medio de la pandemia, no imaginábamos».
Para Massa, los principales objetivos del programa económico consisten en alcanzar el «orden fiscal, con un Estado ordenado cumpliendo sus metas» y «construir superávit comercial».
De todas maneras, el ministro admitió que aún están en deuda en todo lo relativo a los niveles de ingresos y pobreza: «El ingreso cayó más de 23 puntos en los últimos seis años, por lo tanto tenemos que trabajar para mejorarlo, como así también políticas más fuertes en la lucha contra la pobreza y la indigencia».
Destacó además que «encaminamos el trabajo y diálogo con el sector agroindustrial» y que «ayer y hoy las cerealeras empezaron a suscribir operaciones vía nodo para adelantar todo lo que es prefinanciación de exportaciones».
«Estamos además buscando un acuerdo de trabajo técnico con los técnicos de la Mesa de Enlace para avanzar en un mecanismo más rápido de liquidación, que nos permita a nosotros como Estado nación aprovechar al máximo la potencia y la generación de riqueza que tiene el sector agroindustrial argentino que es fabuloso», agregó.
Por otra parte, se refirió al nuevo régimen de distribución de subsidios y dijo que en el anterior «se producía la injusticia de quien más consumía, más subsidio recibía y atentaba contra el cuidado, el ahorro de recursos energéticos» así como contra la distribución del ingresos.
En ese sentido, agradeció «a los cuatro millones de argentinos que renunciaron a los subsidios» porque «mostraron la voluntad de acompañar el esfuerzo del Estado en llevar adelante un ahorro de recursos que redunda, si cuidamos la luz, el gas, el agua, en ahorro para el Estado y también en ahorro para el ciudadano».