Cuando restan apenas 2 días para que cierre el plazo de presentación de los frentes electorales para competir en las Primarias Abiertas (PASO) de agosto, son tres las líneas internas del PJ que ya confirmaron que se van a presentar.
El primer espacio es el que impulsa la candidatura de Florencio Randazzo, y que fue presentado la semana pasada bajo el nombre de «cumplir», el valor de la palabra, como intento de rescatar el posicionamiento del ex ministro del Interior y Transporte que en 2015 había dicho que era candidato a presidente o nada, y luego rechazó una oferta para competir por la provincia.
Pero también el duhaldismo reaparece antes de agosto y presentará «Justicia y Dignidad Peronista», un armado que se nutre de la vieja guardia del peronismo bonaerense y pretende reivindicar un PJ no kirchnerista, que a diferencia del randazzismo, si reniega de los 12 años de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner. Pocos creen que finalmente compitan y se especula con que se trata más bien de una presentación testimonial.
Cierra el cuadro de situación la línea que lidera Mario Ishii de José C. Paz, que para muchos es en realidad un reaseguro para CFK, que contaría con ese sello si desde el kirchnerismo no inscriben una lista propia y algo sale mal en la aventura de ir por afuera.
En ese sentido es cada vez más una certeza que una especulación la decisión de la ex presidenta de competir con el Frente Ciudadano sin el sello del PJ, una jugada que utilizó en el año 2005 cuando enfrentó ni más ni menos que a Hilda «Chiche» Duhalde, a la que le arrebato un triunfo en la provincia, enterrando definitivamente las aspiraciones del duhaldismo de conducir el PJ a nivel nacional.
Los kirchneristas creen que pueden repetir ese escenario y contar con el apoyo mayoritario de los jefes comunales que inclinarían la balanza a favor del Frente Ciudadano en desmedro del PJ, aunque no todos parecen estar de acuerdo con esa estrategia porque entienden que claramente si CFK pone las reglas de juego, también pone los candidatos.
Por eso no se descarta tampoco que en cada distrito los jefes comunales apoyen a CFK o a Randazzo, pero a nivel distrital utilicen la herramienta electoral que más les convenga, indistintamente de la orden que llegue de arriba.
Fuente Agencia Nova