Todo sucedió después que el presidente argentino calificara a su par como “asesino terrorista”. Es la segunda crisis diplomática bilateral desatada este año.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, retirará a su embajador en Buenos Aires después que Javier Milei lo tildara de “asesino terrorista”.
Según informó el periodista de TN Gonzalo Bañez, Petro le ordenó regresar a Bogotá a su representante, Camilo Romero.
No es la primera crisis que enfrenta a ambos gobiernos. En enero pasado, Milei había calificado a Petro como un “comunista asesino”. El mandatario colombiano llamó enseguida a consultas a su embajador. Incluso, entonces, la Cancillería colombiana afirmó que “estas declaraciones deterioran los lazos históricos de amistad entre las dos naciones”.
Ambos países mantienen desde entonces tensas relaciones bilaterales.
Qué dijo Javier Milei sobre el presidente colombiano Gustavo Petro
La nueva crisis estalló después que se divulgaran nuevas declaraciones de Milei dadas al periodista Andrés Oppenheimer, que se emitirá en CNN el domingo 31 de marzo.
“Mucho no se puede esperar de alguien que era un asesino terrorista”, dijo Milei, según consignó la revista colombiana Semana.
Petro, el primer presidente de izquierda de Colombia, es un economista y exguerrillero del grupo M19.
En la entrevista con CNN, Milei también apuntó contra el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, habitual crítico del mandatario argentino, a cuyo ascenso al poder llegó a comparar con el nazismo.
“Que un ignorante como López Obrador hable mal de mí, me enaltece”, afirmó Milei.
Petro y Milei han mantenido un duelo de cuestionamientos desde antes de la asunción del presidente argentino. Tras las habituales críticas de Milei al socialismo, el mandatario colombiano le respondió el 30 de agosto en su cuenta de X: “Esto decía Hitler”.
En enero, ya como presidente, Milei arrojó munición gruesa contra Petro cuando lo calificó de “comunista asesino”, desatando la primera crisis diplomática entre ambos gobiernos. Ahora, la nueva crisis amenaza con profundizar la grieta ideológica entre ambos gobiernos.